La paella es el plato rey de España y el más internacional de la nación. Esa combinación deliciosa de arroz y carnes es muy completa, por lo que suele servirse sola. Sin embargo, además de un buen vino para maridar, existen acompañantes o entradas que le combinan muy bien. La característica general es que sean frescos y ligeros. Aquí te mostramos algunas ideas para destacar esta receta que en tierras ibéricas se acostumbra a preparar los domingos.
1 Gazpacho
El gazpacho es una sopa fría a base de tomates. Esta preparación es refrescante y no opaca los sabores de la paella, lo que la convierte en un perfecto entrante. Elaborar este platillo es sumamente sencillo. Se requiere de tomates, ajo, pepinos, aceite, vinagre, sal y agua. Se trocean todos los vegetales y se llevan al procesador de alimentos con el resto de los ingredientes. Una vez que se tenga una textura fina, se pasa por el colador y se refrigera al menos por dos horas antes de servir.
2 Setas con cebollas
Las setas son ligeras y fáciles de combinar con cualquier plato, incluso son perfectas como tapas. Puedes servirlas mezcladas con cebollas para darles más sabor. Para su elaboración bastará con confitar las cebollas y luego saltearlas con las setas en una sartén. Salpimentar y llevar a la mesa para tapear antes del plato principal.
3 Ensalada de tomate
Casi todas las ensaladas verdes quedarán geniales como acompañante o aperitivo de la paella, pero la de tomate brinda una acidez y dulzura especiales. Para realizarla, corta tomates en trozos y lechuga fresca en igual cantidad. Para aliñarla usa sal, pimienta, aceite, un chorrito de vinagre y una pizca de azúcar.
4 Mejillones
Cualquier tipo de paella (verduras, mariscos o mixta) es combinable con una buena tapa de mejillones. Por su textura y sabor resulta fenomenal como acompañante, más aún con una copa de vino blanco helado. La forma más sencilla y sabrosa de elaborarlos es al vapor. Para ello lava muy bien los mejillones y colócalos con un poco de agua en una olla. Añade unas hojitas de laurel y un chorrito de limón y tápalos. Cuando estén abiertos estarán listos para su consumo.
5 Pulpo a la gallega
Al igual que el mejillón, el pulpo es otro fruto del mar que no desentona nunca. Es bajo en grasas, no resulta pesado y es muy saludable. Una rica manera de servirlo es “a la gallega”. Limpia el pulpo y trocéalo. Ponlo a hervir en una olla hasta que se ablande. En otra olla se ponen a cocinar patatas. Cuando estén cocidas se pelan y se cortan en rodajas. Se colocan en un plato grande y se espolvorean con pimentón (paprika). Luego se coloca encima el pulpo cocido y se aliña con más pimentón en polvo, sal y aceite de oliva.
6 Verduras y vegetales a las brasas
Si la comida será al aire libre, no hay nada mejor que aprovechar la parrillera y poner unos vegetales al calor de las brasas. Puedes usar los que más te gusten (pimientos, berenjenas, calabacín, repollo morado, espárragos, alcachofas). Solo debes barnizarlos con un poco de aceite y salpimentar. Se colocan al fuego (bajo). Recuerda que cada verdura tiene un tiempo de cocción distinta.