Seguramente tus redes sociales se vieron inundadas con esta imagen a finales de julio: una despampanante mujer rubia y alta llamada Riss y vestida con un sexy traje de baño verde con escote cruzado, caminaba por una pasarela, robando todas las miradas. Su cuerpo, curvilíneo y tonificado, no disponía de la típica figura extremadamente delgada que acostumbramos a ver en los desfiles de moda. Este desafío a los estándares de belleza se hizo rápidamente viral en internet y se convirtió en una oda al amor propio y a la lucha contra los estereotipos. Pero, ¿quién es Riss? En este artículo te contamos todo lo que sabemos sobre esta influencer.
La realidad con Riss
Aunque el ahora famoso video fue su “presentación” a millones de personas en todo el mundo, Riss es en realidad una influencer estadounidense muy conocida. Sus 563 000 seguidores en su cuenta principal de Instagram, @realitywithriss, consumen su contenido sobre su vida, viajes, comida, moda y fitness. Dispone además de 10 500 seguidores en su cuenta alternativa, @thiccfitwithriss, especializada en rutinas de ejercicio. Ahí no acaba su reinado, su canal de YouTube cuenta con 355 000 suscriptores y tiene videos con más de un millón de visualizaciones en TikTok. En resumen, Riss no es ninguna principiante en el mundo de la moda y el fitness. Ha modelado para varias marcas y la mayor parte de su contenido se basa en la aceptación y el positivismo corporal, lo que le ha granjeado una legión de fans.
¿Quién es?
Su nombre real es Marissa DuBois. Nació en Miami, Florida, el 31 de marzo de 1995 (tiene 28 años). Su padre es empresario y su mamá es ama de casa. Desde pequeña mostró afinidad por la moda pero terminó estudiando criminología en la Florida State University, ya que tenía planeado entrar a trabajar en el FBI o seguir una carrera militar. Sin embargo, en su primer trabajo como pasante como detective de homicidios, DuBois tuvo una corazonada y decidió abandonar todo. Se fue de viaje a Marruecos, China y Tailandia completamente sola. En su recorrido conoció a varios nómadas digitales y se enamoró de esa “libertad” que da el trabajar en Internet de forma autónoma. Cuando regresó a Estados Unidos decidió estudiar marketing y manejo de redes sociales mientras trabajaba como camarera.
Aplicar lo aprendido
Afortunadamente, DuBois tuvo el apoyo de sus padres en todo momento. Así que pudo prepararse lo suficiente. En un lapso de 3 años ya estaba manejando las redes sociales de varios clientes. Ahora ya con suficiente experiencia, era hora de aplicar esos conocimientos en sí misma. Fue entonces cuando comenzó a trabajar en su “marca”. Creó sus cuentas, consiguió colaboraciones y aprovechó su despampanante belleza para convertirse en una modelo “no convencional” para varios productos. En poco tiempo su papel como influencer de amor propio, positivismo corporal y empoderamiento femenino se hizo claro. Riss, el nombre que usa en sus redes, afirma que siempre trata de mostrarse lo más real posible ante sus seguidores e inspirarlos a la par que apoyar su diversidad corporal.
El bikini verde
El famoso desfile de Riss ocurrió el pasado 3 de abril en la Fort Lauderdale Fashion Week de Florida. Ella había publicado ese video en sus cuentas, pero este no se hizo viral hasta finales de julio, cuando el medio Daily Loud lo republicó y en apenas 15 horas llegó a 40 millones de visualizaciones. Después, la plataforma de contenido viral @WORLDSTAR hizo lo mismo, contribuyendo a su difusión. Entonces, las voluptuosas caderas de Riss, en contraste con su definido abdomen, hicieron que la influencer ganara miles de elogios de la noche a la mañana. Comentarios como “Cuando la gente me pregunta si hay un Dios, esto es lo que les mostraré”, “La mujer más atractiva que he visto nunca, sin duda” y “Qué belleza, no puedo dejar de mirarte” inundaron las redes sociales.
Respuesta a las críticas
Cuando en abril publicó el video original en sus cuentas, Riss lo hizo con la siguiente leyenda: “Todo esto viene de mi mamá. Nada de bisturí”. Sin embargo, junto con los elogios, no faltaron algunas personas que criticaron su imagen y aseguraron que era imposible que tuviera ese cuerpo de forma natural, acusándola de haberse sometido a cirugías plásticas. En respuesta a tales críticas, la modelo acudió a sus redes sociales y publicó una fotografía de sí misma dos años antes de acudir a la universidad. En la imagen se la ve de adolescente, sosteniendo un cartel en el que aparece un dibujo de una mujer con grandes curvas y que dice “Big Judy”. “Para los raros que de alguna manera piensan que mi cuerpo es falso… Esta fue mi firma de último año (en la preparatoria)”. Así, Riss demostró que su figura siempre ha sido naturalmente curvilínea.