Una de las verdades más ciertas es que cada pareja es un mundo, no cabe duda. Pero a veces existen ciertas pautas de comportamiento que pueden darnos ciertas pistas sobre el rumbo de nuestra relación.
¿Cuántas veces te has preguntado a ti mismo si estáis en el mismo punto? Obviamente, lo ideal es hablar las cosas con toda la confianza posible, pero no todo el mundo tiene esa capacidad o intención. Entonces, ¿cómo puedo saber si la quiero yo más que ella a mí?
Siempre eres tú quien propone quedar
Este es un indicador clarísimo del interés de una parte y la otra. Cuando una persona quiere a otra, desea pasar con ella todo el tiempo posible, dentro de sus posibilidades. Si eres tú quien siempre tiene que organizar las cosas o hacer por veros, ¡atención! Es bastante probable que no estéis en el mismo punto.
Como en casi todo en la vida, en el término medio está la virtud.
No se interesa por tus cosas
Por obvio que pueda parecer, es esencial para una pareja interesarse por las cosas que son importantes para el otro. Preguntas tan sencillas como “¿qué tal el día?”, “¿cómo estás?” o “¿has descansado?” pueden marcar totalmente la diferencia en cuanto al nivel de implicación de la pareja o los sentimientos de uno por el otro.
No confía en ti
La confianza es el pilar de cualquier pareja que se precie. Sin ella, no puede existir una relación sana y mutua. Pero si una de las partes no demuestra tener confianza en la otra (y no solo en lo referente a celos), es que algo no está funcionando como debiera.
Tener confianza es poder hablar de cualquier cosa con absoluta claridad y transparencia, al igual que poder ser tú mismo sin tener que esforzarte por dar una imagen de ti que no se corresponda con cómo eres en realidad. Si percibes actitudes forzadas o incómodas, ¡cuidado!
No apoya tus hobbies y aficiones
La típica pelea porque uno quiere ver el fútbol o quiere ir a un concierto de un grupo que al otro no le gusta es indicativo de que algo no funciona bien en la pareja.
Disfrutar de tiempo libre por separado es algo esencial para la salud de la relación en pareja, así como respetar los diferentes gustos y aficiones de ambos. Intentar tomarse algo de tiempo para disfrutar de vuestro ocio juntos debería ser algo prioritario, aunque en ocasiones haya que hacer pequeños sacrificios. Si critica tus aficiones o no quiere formar parte de ellas sin motivo justificado
No está a tu lado en los malos momentos
Aunque suene a una frase muy manida, debemos valorar a quien está a nuestro lado a las buenas, pero, sobre todo en las malas. “Amigos” con los que tomar algo, salir de fiesta o pasarlo bien siempre vas a tener, pero con quién contar en las malas es algo esencial. Es aplicable a todos los aspectos de la vida, pero en cuestiones de pareja, cobra especial importancia.
Cualquier buena pareja que se precie debe estar a las duras y a las maduras. Si pasas por una mala racha y quien se supone que debe apoyarte de manera incondicional no lo hace, haz saltar todas las alarmas de tu interior y reflexiona sobre vuestra relación, porque no parece ser tan sana como crees.