La crianza de los hijos es una tarea difícil, y cuando tienes que formar a las futuras caras de una monarquía, la presión ciertamente aumenta. Con toda seguridad, los príncipes de Gales William y Kate, se convertirán en reyes de Reino Unido más temprano que tarde, y los siguientes en la línea de sucesión serán sus hijos George, Charlotte y Louis, en ese orden. La pareja se ha caracterizado por combinar algunas reglas de crianza estrictas, como las que se esperaría en este caso, con otras más modernas que el público cree que generarán un cambio positivo en el palacio real en el futuro. Algunas de estas reglas pueden servirte de inspiración para tu propio estilo de crianza.
1. Hablar con ellos a su nivel
Según los psicólogos, ponerte a la altura de tus hijos cuando necesitas hablarles de algo serio o importante ayuda no solo a captar mejor su atención, sino a que se sientan involucrados en la conversión y acepten tu autoridad de una forma menos intimidante. Kate lo sabe. Han sido varias las veces en las que la princesa ha sido captada por los paparazzi agachándose al nivel de sus niños, especialmente cuando necesita reclamarles algo o pedirles que se comporten. Dado que los pequeños siempre pueden llegar a sentirse abrumados en eventos públicos, bajo la mirada de tanta gente, esta estrategia también sirve para calmarlos y reafirmar su autoestima.
2. Prohibido Gritar
Una de las reglas más conocidas dentro del hogar de los príncipes de Gales es que los niños tienen prohibido gritarse entre ellos. Según una fuente, a los pequeños se les motiva a discutir de forma respetuosa, explicando sus sentimientos y debatiendo para encontrar un punto en común durante esas inevitables peleas de hermanos. Y la regla no es solo para las discusiones, sino para todas las conversaciones en general: Kate y William también tratan de evitar gritarles. Esta norma de convivencia ha cobrado más relevancia desde que Kate fue diagnosticada con un cáncer en 2024, pues buscaron que el ambiente en el hogar fuera tranquilo para su tratamiento y recuperación.
3. Comunicación sin castigos
Kate y William no están de acuerdo con los castigos muy duros, mucho menos con los corporales. Tampoco aplican el llamado “tiempo fuera”, en el que si un niño se porta mal es obligado a sentarse en un rincón en solitario. Pero, dado que el gritar también está prohibido, ¿entonces cómo lidian con los problemas? Los príncipes son defensores de la comunicación. Creen en explicarles a sus hijos qué fue lo que hicieron mal, por qué estuvo mal, cómo pueden evitar que vuelva a pasar y cuáles serían las consecuencias si no hacen caso. Con esto, la pareja busca inculcarles buenas habilidades de comunicación efectiva que les permitan desarrollar relaciones sanas cuando sean adultos.
4. Los días de escuela se respetan
Al formar parte de la monarquía inglesa, se espera ver a George, Charlotte y Louis participando en toda clase de eventos públicos, acompañando a sus padres. Tanto es así, que cada vez que William y Kate llegan solos a algún sitio, no falta la pregunta: “¿Y dónde están los niños?”. Sin embargo, los padres tienen una regla bastante estricta que a veces incluso choca con los deberes reales: nada de salidas o actividades en días de escuela. Si los chicos tienen que ir al colegio al día siguiente, no se les permite asistir a actos públicos. Por ejemplo, una fuente reveló que los niños prácticamente les rogaron a los príncipes que los llevaran al Royal Variety Performance de 2023, un programa de televisión que se graba anualmente en el Reino Unido para recaudar fondos, porque asistirían muchas celebridades que ansiaban conocer en persona. Pero como se celebró un día laboral de la semana, los tres se quedaron en casa.
5. Colaborar en casa
Sí, los príncipes obviamente cuentan con un gran personal de servicio en su hogar, pero eso no significa que a los niños se les permita hacer y deshacer a su antojo. Kate puso muchísimo énfasis en criar a sus hijos para que sean independientes, a pesar de los privilegios que tienen. Por eso, los tres tienen distintas tareas del hogar que deben cumplir, como ordenar ellos mismos su ropa después de que haya sido lavada o mantener sus habitaciones lo más ordenadas posible. También es sabido que a Kate le encantan los trabajos al aire libre como la jardinería y las tareas de la granja, y cada vez que tiene ocasión motiva a los niños a que colaboren.
6. Tecnología limitada
Tanto Kate como William han dicho que ahora sí permiten que sus hijos usen dispositivos como tabletas en sus ratos libres, algo que estaba prohibido cuando eran más pequeños. Sin embargo, el “tiempo frente a pantallas”, incluyendo la televisión, es limitado y supervisado por su seguridad. El objetivo de esta regla es promover la preferencia por los juguetes tradicionales y las actividades al aire libre para estimular la imaginación y garantizar una relación sana con la tecnología. “Pasar tiempo de calidad juntos es un aspecto muy importante de la vida familiar y, para mí, como madre, lo que valoro son los momentos familiares simples, como jugar juntos al aire libre”, ha dicho Kate.
7. Cuidar a su madre
Tras el diagnóstico de Kate, a los niños se les exige un mejor comportamiento en casa y en público para apoyarla en su recuperación. Como ya se mencionó en puntos anteriores, los gritos están prohibidos y deben ayudar a mantener sus ambientes limpios y ordenados. Ahora, a esto se le suma que deben tener una mayor higiene personal, como lavarse las manos frecuentemente y mantener su ropa pulcra, para poder interactuar con su madre y evitar que Kate se contagie debido a un sistema inmune deprimido. Durante los primeros meses del tratamiento, también tenían prohibido saltar sobre Kate o tratarla de forma brusca.
