El problema de las puntas abiertas afecta incluso al cabello sano. La causa es la falta de hidratación y nutrición. Esto puede suceder por muchas razones, como un cuidado capilar inadecuado, falta de protección térmica, falta de vitaminas o los efectos secundarios de alguna medicación.
Hay varios factores que son perjudiciales para el cabello y es importante aprender a evitarlos. Mientras se evitan estos factores, es igualmente importante cuidar nuestro pelo de forma adecuada. En este artículo te contamos cómo combinar la prevención y el cuidado de las puntas abiertas para mantener tu cabello sano y fuerte.
- Teñido del cabello
No es recomendable teñirse más de una vez al mes. Al mismo tiempo, si estás teñida de rubia, tampoco te olvides de teñirte a tiempo, porque el cabello decolorado es cabello vacío sin pigmento. El teñido del cabello te permite rellenar los huecos en la cutícula y, por lo tanto, fortalece ligeramente el pelo y previene su fragilidad, estado que conduce a la aparición de puntas abiertas.
- Mascarilla con aceites cosméticos. Los aceites de linaza, melocotón, almendra, coco u oliva son ideales para tratar las puntas del cabello. Mezcla con una yema de huevo cualquier aceite de los mencionados y déjalo actuar sobre el pelo durante 30 minutos. Después, aclara con agua tibia.
- Alimentación
Observa tu dieta: trata de deshacerte de la comida “basura”, come más verduras y frutas, introduce cereales en tu alimentación e intenta consumir más proteínas. Al fin y al cabo, una dieta equilibrada es rica en vitaminas y minerales esenciales, que son la clave para conseguir un cabello hermoso.
- Mascarilla de kéfir. Aplica kéfir a temperatura ambiente sobre el cabello previamente lavado y seco. Frota bien el producto en el cuero cabelludo y las puntas y envuelve el pelo en una toalla. Puedes dejar actuar la mascarilla toda la noche: descansa y tu cabello se regenerará mientras tanto.
- Hidratación
El agua es el elemento vital del cabello. Trata de beber al menos 30 ml de agua pura (ni café ni té) por cada kilo de peso.
- Levadura. Puedes hacer una buena mascarilla nutritiva que al mismo tiempo hidrate tus puntas mezclando dos cucharaditas de levadura seca con 50 ml de kéfir. Aplica esta mezcla de medios a puntas, envuélvela en una envoltura de plástico y déjala actuar media hora.
- Consumo de tabaco y alcohol
Trata de abandonar los malos hábitos, o al menos de reducir el consumo de tabaco y alcohol. Todo tu cuerpo (y no sólo el pelo) te lo agradecerá.
- Si no tienes un aceite o suero a mano, usa tu crema hidratante facial o de manos para las puntas.
- Peinar el cabello húmedo
Trata el pelo mojado con cuidado. No se recomienda cepillarlo o frotarlo fuertemente con una toalla. Recuerda: el cabello mojado es muy vulnerable y se rompe con más facilidad.
- Mascarilla de miel y aceite de oliva. Mezcla una cucharadita de miel con una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. Aplica la mezcla en las puntas y déjala actuar durante una hora.
- Masaje del cuero cabelludo
Cepillar y masajear el cuero cabelludo con frecuencia mejorará la circulación y nutrirá tu cabello con nutrientes propios y oxígeno.
- Mascarilla de aloe vera. Mezcla proporciones iguales de aceite de jojoba y gel de aloe. Aplica la mezcla ligeramente tibia en toda la longitud del cabello y enjuágala cuando hayan pasado 30 minutos.