Los cambios que experimenta el cuerpo de las mujeres con el paso de los años son determinantes a la hora de encontrar explicación a la acumulación grasa abdominal. Esto se da con relativa frecuencia, aunque, como es lógico, no afecta a todas las mujeres por igual (y también afecta a los hombres, aunque por otros motivos).
Según los expertos, la acumulación de grasa abdominal no se debe, por norma general, a malos hábitos, sino que más bien se trata de un fenómeno natural. Así que culpabilidad fuera. Se debe aceptar con total naturalidad y (eso sí) cuidarse para evitar que vaya a mayores.
La razón por la que la grasa se acumula en esa zona
El hecho de cumplir años no es el único factor que hace que la grasa se acumule en la zona abdominal. Existen otros motivos, como la falta de ejercicio, el estrés, los problemas de sueño o llevar una mala alimentación.
Con los años, la masa muscular se debilita. La mayoría del consumo energético que realiza nuestro cuerpo se va hacia esos músculos. Así que, si los ejercitamos menos, algo frecuente con la edad, tenemos más calorías en el cuerpo ya que las quemamos menos.
La menopausia, uno de los principales causantes
La menopausia es otro de los factores que provoca la acumulación de grasa abdominal. Aunque este fenómeno afecta también al género masculino, es más frecuente en mujeres.
Este proceso provoca cambios de gran calado en el organismo que también afectan a la distribución de la grasa. Según varios estudios, es frecuente que durante la menopausia se produzcan cambios en la manera en la que el cuerpo distribuye y acumula la grasa. Antes de esa etapa, es más habitual que la grasa se acumule en la zona de los glúteos y las extremidades. Pero después pasa a localizarse más en la zona abdominal. Uno de los principales motivos es el cambio hormonal que sufre el cuerpo en este período, ya que se produce una importante disminución de estrógenos (las hormonas femeninas).
Trucos para evitarlo
Como hemos comentado, esto no es culpa de nadie, ya que se trata de algo natural. Pero sí que podemos tomar una serie de medidas para evitar que la situación vaya a más, ya que puede llegar a provocar graves problemas de salud.
Una de las acciones que más nos ayudarán a evitar la acumulación de grasa en la zona abdominal es evitar llevar una vida sedentaria. Independientemente de que se trate de un proceso natural que suele aparecer con el paso de los años, la falta de ejercicio físico puede provocar una serie de problemas de salud que van más allá de que tengamos que comprarnos una talla más de pantalones. Algunos de ellos son los trombos o una tensión arterial elevada. Practicar ejercicio físico de manera regular siempre es una buena idea, y más en este caso y momento vital.
Llevar una dieta equilibrada y saludable también es esencial para evitar que la grasa que se acumula a nivel abdominal vaya a más. Alimentarse bien, además, siempre es beneficioso para cualquier otra patología e incluso evita su aparición.
El sueño también es de vital importancia. Un buen descanso nos garantiza una mejor salud en general, con menos estrés, que es otro de los factores que juegan en nuestra contra en todos los momentos de la vida.